Al subir al escenario con la nueva canción instrumental titulada "Return of the Stingray Guitar," Bono fue inmediatamente a recorrer la circunferencia de la enorme producción 360, tarareando a cada esquina con público: "Torino, Torino…"
Desde los inconfundibles acordes de inicio de "Beautiful Day" al cierre de bendición de "Moment Of Surrender," dos horas y cuarto después, todo el público italiano elevó el espectáculo a la órbita.
Formando el setlist con canciones de ocho discos diferentes, la banda también estrenó dos canciones nuevas: "Glastonbury" un rock con una gran guitarra líder inspirada en el festival veraniego del Reino Unido, y una versión acústica de una balada meditativa, "North Star," descrita por Bono como "una canción de amor al universo."
Cualquier concierto de U2 es una celebración, pero ésta fue una noche especial con la banda regresando al escenario y tocando en vivo por primera vez en nueve meses. Fue un poco como una ocasión familiar.
"¿Importa mucho la familia en Italia, verdad?," preguntó Bono. "Esta banda es también una familia: la oveja negra de la familia, Adam Clayton en el bajo; en la batería, el bebé de la banda, Larry Mullen Jr., y The Edge, nuestro hijo del medio… el domingo es su cumpleaños."
Entonces 40 mil italianos le cantaron el 'Feliz Cumpleaños' a Edge.
"Y yo soy el hijo pródigo," continuó Bono. "Y quiero agradecerles todo el amor y las cartas que me enviaron en los recientes meses, gracias por eso. Eso está en el pasado ahora y estoy muy en forma para el futuro…"
La de esta noche fue una actuación seriamente ajustada de la banda y de la producción, con deslumbrantes cambios creativos en las visuales de la pantalla complementando las sorpresas en el setlist que también incluyeron la presentación de "Hold Me Thrill Me Kiss Me Kill Me," de la banda de sonido original de la película Batman Forever y "Miss Sarajevo," originalmente escrita para e interpretada con Luciano Pavarotti. Nadie sabe cómo cantar ópera como esta gente.
Fuente: U2.com