En el último concierto que U2 ofreció en Argentina, en el Estadio Único de La Plata, los presentes vivimos un momento sorpresa muy emotivo.
Luego que la banda interpretara junto a todo el estadio el himno "I Still Haven't Found What I'm Looking For" Bono invitó al escenario al gran León Gieco, para que cantara nada más y nada menos que "Solo Le Pido A Dios".
En una entrevista realizada por el periodista Eduardo Fabregat, reflejada en el diario Página/12, León Gieco habla sobre este particular encuentro con la banda irlandesa.
"¿Vos creías que venías a tomar un par de vinos?"
Las cosas no habían terminado de cuajar, la escena que tendría lugar un rato después aún no cristalizaba: en la tarde del domingo, cuando este cronista se cruzó con León Gieco en el backstage, la conversación giró sobre las cualidades de Muse, que estaba a punto de tocar, y la enormidad de lo que se vería después. León ni siquiera dejó entrever la posibilidad de ese inolvidable momento en el que Bono le hizo la segunda en "Solo le pido a Dios", con The Edge lanzando sutiles arreglos de guitarra y el Estadio Unico coreando. Apenas dos días después del aniversario de Malvinas, U2 y Gieco cantando eso de que la guerra no nos sea indiferente, justo antes de que La Garra estallara con "Pride (In The Name Of Love)". Si la velada despedida del 360º Tour, el cierre de tres noches excepcionales en un estadio excepcional, ya tenía una recarga emotiva, el combo agregó una épica inesperada.
"Yo ni siquiera iba a ir a La Plata –recordó León ayer en Rebeldes, soñadores y fugitivos, en la AM 750–. Había hecho un show para Hijos en Chaco, venía con ese quilombo en la cabeza y sabía que me los iba a perder, pero hubo un llamado de la producción que querían que fuera, así que llegué a casa a las 17, agarré el auto y me fui a La Plata." Allí, Gieco descubrió que Bono quería algo más que saludarse y recibir una copia de Mundo Alas: "Toquemos esa canción que quise cantar en River y no me salió bien", propuso el cantante, y así Gieco terminó ensayando con los cuatro U2 en el camarín principal. "Al principio me quedé helado, yo había ido a disfrutar, me había tomado un par de vinos en el VIP y de repente se me pasó toda la tranquilidad, era todo un compromiso, subir a ese escenario, con esa gente... no es un recital en el Gran Rex. A veces cuesta que venga la adrenalina, si te dicen dos o tres días antes te vas preparando, pero así... el mismo Bono se reía, me decía ‘¿Vos te creías que venías a tomarte unos vinos y nada más?’."
–¿Y el show, León?
–Me encantó, aunque no estaba en un lugar privilegiado. Fui invitado a un lugar para ver y escuchar perfecto... ¡y este tipo nos jodió la noche! (se ríe a carcajadas) Me quedé en un lugar donde me fueron a buscar para tocar, y después mis lugares estaban ocupados. Me dijeron de ir al mangrullo pero había que atravesar toda la gente: si no hubiera tocado me iban a pedir fotos dos o tres nada más, pero después de tocar... me gastaban. Así que lo vi desde un lugar no privilegiado, pero estuvo muy bueno. Es un show muy grande.
–Pero a pesar de toda la monstruosidad no dejan de ser una banda.
–No, porque todo viene más atrás de ser una banda de músicos. Son cuatro amigos que siguen manteniendo esa cosa campesina irlandesa, que tiene mucho que ver con los argentinos. Yo creo que somos parecidos, un país medio sufrido...
–El dijo algo así.
–¿En serio? No lo escuché... Y sí, hay una cosa de sangre, de lucha, y eso no lo abandonaron. Bono actúa igual que cuando yo voy al interior y me viene a ver un luthier, y voy a su casa y veo el revuelo que se arma, pero me gusta tener ese contacto. El hace lo mismo, cuando repite tres shows le gusta una adrenalina rara, eso de un chabón como yo que suba al escenario, un agregado que te hace funcionar en el escenario.
–Para hacer lo que hacen tiene que haber pasión.
–Uno ve a Bono arriba del escenario, tiene una energía y una voz increíbles. Ya estoy yendo a un profesor de vocalización, porque como lo escuché cantar el domingo... tremendo. Dos shows intensos sábado y domingo, y el tipo tuvo la voluntad de venir a hablar, sacarse fotos con otra gente. Podía estar tranqui, no necesita nada, no tiene nada que agregarle a lo suyo. ¿Acaso necesita que yo suba a su escenario?
A continuación puedes escuchar la entrevista completa con León Gieco hablando de la trastienda del encuentro con U2 y sus "amigos", ¡imperdible!