Q ha tenido la exclusiva mundial de una exhibición preliminar del nuevo disco de U2.
Las sesiones por el tan esperado disco estuvieron completas a paso febril en los Olympic Studios en el norte de Londres durante noviembre. Sin embargo, las grabaciones empezaron en octubre de 2006, con U2 uniéndose una vez más a los productores Brian Eno y Daniel Lanois después de explorar la idea de trabajar con Rick Rubin. Entre ambos, Lanois y Eno trabajaron en la trilogía clave de discos de U2, “The Unforgettable Fire”, “The Joshua Tree” y “Achtung Baby”.
“Aprendimos mucho de Rick”, dice Bono. “El esta enamorado hasta las puntas de los píes con el concepto de la canción. Pero nuestro sentimiento fue, no hagas rock and roll solo por las canciones. Queremos canciones que nos pongan en un mundo diferente”.
“Y porque Brian y Dan son experimentales en sus recodos, la oportunidad de traer algo de experimentación dentro del pop es muy excitante para ellos. Y para nosotros”.
Al tiempo que U2 arribaba a los Olympic Studios, Eno estuvo guiando al disco a una conclusión con varios productores que fueron llamados para mezclar canciones específicas, el compañero de hace mucho tiempo Steve Lillywhite y el Will.I.Am de los Black Eyed Peas. Como se ha vuelto costumbre en los discos de U2, las canciones fueron “re-trabajadas”, y en algunos casos completamente renovadas, hasta último momento.
Q inicialmente escuchó una preliminar de siete canciones en varios estados de acabado tal como la banda las habían terminado. La primera impresión fue que, mientras los dos más recientes discos de U2 (“All That You Can't Leave Behind” del 2000 y “How To Dismantle An Atomic Bomb” del 2004) marcaron el regreso a lo básico, “No Line On The Horizon” esta más de acuerdo con el espíritu de “Achtung Baby” de 1991: lo cual es decir, un atrevimiento, mas experimentación de colección.
El material en sí mismo recorre una gama desde los clásicos U2 de “Magnificent”, con reflejos de la canción de apertura del “The Unforgettable Fire”, “A Sort Of Homecoming”, en su barrida atmosférica, directamente al pop de “Crazy Tonight” (la canción donde Will.I.Am tomó parte) y la altanera “Stand Up”, en donde U2 se relaciona con su, hasta ahora no escuchado, lado funky, a pesar de ser propulsado por el brillante trabajo con la guitarra de Edge, una marca registrada de varias de las canciones. La última canción es también el hogar de la conocida lírica de Bono: “Stand up to rock stars/Napoleon is in high heels/Be careful of small men with big ideas”.
Entre otras instantáneamente sorprendentes canciones esta “Get Your Boots On”, un rock eléctrico pesado que puede ser la marca del punto de destino que la banda ha estado buscando en “Pop”; “Winter”, con una fina letra de Bono sobre un soldado en una zona de guerra no especificada, rodeada por una engañosa canción rítmica simple y un evocativo arreglo de cuerdas cortesía de Eno; y la majestuosa “Unknown Caller”, que fue grabada en Fez y abre con los sonidos de los pájaros grabados por Eno durante el amanecer marroquí.
En Olympic, fue excitantemente reservado para dos canciones: “Moment Of Surrender” y “Breathe”. Una estridente grabación épica de siete minutos de una simple toma, la primera de esta suena como un gran momento de U2 con el espíritu de “One”, mientras Eno sugiere a la última como la potencialmente mejor canción que la banda haya hecho y escrito.
Una semana después de playback en Olympic, Bono ofreció a Q una escucha privada de dos canciones no terminadas, pasándolas a ambas en el stereo de su auto a soberbio volumen mientras estábamos siendo llevados por Londres en su hora pico de tránsito. Había dos versiones del título de la canción: la primera es otra del tipo “Unforgettable Fire” que se enciende de forma lenta a un final eufórico, la segunda un punk como un homenaje a Pixies/Buzzcocks que procede a paso jadeante.
“Hemos grabado la segunda versión justo anoche”, explica el cantante mientras entusiasmadamente toca una batería imaginaria en el aire. “Estoy muy excitado con esta”.
Q disiente, votamos más por la versión anterior.
Otra canción, “Every Breaking Wave”, tiene un comienzo que toma forma alrededor de un emotivo Bono y un apropiado incremento del climax. “Puede ser que estemos en algo especial ahí”, advierte Bono.
Y dentro del campamento de U2, esta el consenso general acerca del disco. Un Eno claramente excitado le dijo a Q que “No Line On The Horizon” puede ser el mejor disco de la banda, esta opinión también hace eco en Edge.
“Hemos aprendido algunas cosas durante los años”, dice el guitarrista. “Así que creo (que el disco) puede ser el acercamiento a todos aquellos momentos de ‘eureka’ del pasado”.
Las sesiones por el tan esperado disco estuvieron completas a paso febril en los Olympic Studios en el norte de Londres durante noviembre. Sin embargo, las grabaciones empezaron en octubre de 2006, con U2 uniéndose una vez más a los productores Brian Eno y Daniel Lanois después de explorar la idea de trabajar con Rick Rubin. Entre ambos, Lanois y Eno trabajaron en la trilogía clave de discos de U2, “The Unforgettable Fire”, “The Joshua Tree” y “Achtung Baby”.
“Aprendimos mucho de Rick”, dice Bono. “El esta enamorado hasta las puntas de los píes con el concepto de la canción. Pero nuestro sentimiento fue, no hagas rock and roll solo por las canciones. Queremos canciones que nos pongan en un mundo diferente”.
“Y porque Brian y Dan son experimentales en sus recodos, la oportunidad de traer algo de experimentación dentro del pop es muy excitante para ellos. Y para nosotros”.
Al tiempo que U2 arribaba a los Olympic Studios, Eno estuvo guiando al disco a una conclusión con varios productores que fueron llamados para mezclar canciones específicas, el compañero de hace mucho tiempo Steve Lillywhite y el Will.I.Am de los Black Eyed Peas. Como se ha vuelto costumbre en los discos de U2, las canciones fueron “re-trabajadas”, y en algunos casos completamente renovadas, hasta último momento.
Q inicialmente escuchó una preliminar de siete canciones en varios estados de acabado tal como la banda las habían terminado. La primera impresión fue que, mientras los dos más recientes discos de U2 (“All That You Can't Leave Behind” del 2000 y “How To Dismantle An Atomic Bomb” del 2004) marcaron el regreso a lo básico, “No Line On The Horizon” esta más de acuerdo con el espíritu de “Achtung Baby” de 1991: lo cual es decir, un atrevimiento, mas experimentación de colección.
El material en sí mismo recorre una gama desde los clásicos U2 de “Magnificent”, con reflejos de la canción de apertura del “The Unforgettable Fire”, “A Sort Of Homecoming”, en su barrida atmosférica, directamente al pop de “Crazy Tonight” (la canción donde Will.I.Am tomó parte) y la altanera “Stand Up”, en donde U2 se relaciona con su, hasta ahora no escuchado, lado funky, a pesar de ser propulsado por el brillante trabajo con la guitarra de Edge, una marca registrada de varias de las canciones. La última canción es también el hogar de la conocida lírica de Bono: “Stand up to rock stars/Napoleon is in high heels/Be careful of small men with big ideas”.
Entre otras instantáneamente sorprendentes canciones esta “Get Your Boots On”, un rock eléctrico pesado que puede ser la marca del punto de destino que la banda ha estado buscando en “Pop”; “Winter”, con una fina letra de Bono sobre un soldado en una zona de guerra no especificada, rodeada por una engañosa canción rítmica simple y un evocativo arreglo de cuerdas cortesía de Eno; y la majestuosa “Unknown Caller”, que fue grabada en Fez y abre con los sonidos de los pájaros grabados por Eno durante el amanecer marroquí.
En Olympic, fue excitantemente reservado para dos canciones: “Moment Of Surrender” y “Breathe”. Una estridente grabación épica de siete minutos de una simple toma, la primera de esta suena como un gran momento de U2 con el espíritu de “One”, mientras Eno sugiere a la última como la potencialmente mejor canción que la banda haya hecho y escrito.
Una semana después de playback en Olympic, Bono ofreció a Q una escucha privada de dos canciones no terminadas, pasándolas a ambas en el stereo de su auto a soberbio volumen mientras estábamos siendo llevados por Londres en su hora pico de tránsito. Había dos versiones del título de la canción: la primera es otra del tipo “Unforgettable Fire” que se enciende de forma lenta a un final eufórico, la segunda un punk como un homenaje a Pixies/Buzzcocks que procede a paso jadeante.
“Hemos grabado la segunda versión justo anoche”, explica el cantante mientras entusiasmadamente toca una batería imaginaria en el aire. “Estoy muy excitado con esta”.
Q disiente, votamos más por la versión anterior.
Otra canción, “Every Breaking Wave”, tiene un comienzo que toma forma alrededor de un emotivo Bono y un apropiado incremento del climax. “Puede ser que estemos en algo especial ahí”, advierte Bono.
Y dentro del campamento de U2, esta el consenso general acerca del disco. Un Eno claramente excitado le dijo a Q que “No Line On The Horizon” puede ser el mejor disco de la banda, esta opinión también hace eco en Edge.
“Hemos aprendido algunas cosas durante los años”, dice el guitarrista. “Así que creo (que el disco) puede ser el acercamiento a todos aquellos momentos de ‘eureka’ del pasado”.
Fuente: QTheMusic.com