En vísperas de los 25 años del estreno de la película U2: Rattle and Hum podemos conocer la extraña metodología usada por U2 para elegir a su director.
En una entrevista realizada el año pasado el director reflexiona sobre la loca manera en la que consiguió que U2 lo contratara para dirigir su primer documental musical.
Joanou se encontraba en la etapa de post-producción de Three O'Clock High cuando su agente le consiguió una entrevista con U2 un día antes que ellos dejaran Norteamérica camino a Irlanda. Ellos ya habían entrevistado a una serie de directores, pero Joanou dijo que avanzaron cuando le hicieron la pregunta "¿puedes ir a Dublín mañana?" Él dijo que seguro, pero debía llamar al productor de Three O'Clock High para explicarle porqué tenía que dejar la post-producción de esa película tan tempranamente. El productor, aparentemente, no estuvo muy feliz al respecto, pero Joanou fue de todas maneras.
Una vez en Dublín, Joanou dijo que U2 lo entrevistó por cinco días sobre dirigir Rattle And Hum. Tratándose de una historia bastante particular.
"Ellos me llevaban a una casa de un amigo y entonces Bono y Edge se tenían que ir y yo tenía que cenar con el marido y la mujer dueños de casa," dijo Joanou. "Después me llevaban a un casamiento y me dejaban allí también. Yo estaba ahí en el norte de Irlanda y solo en un casamiento irlandés y estaba como '¡Ok, genial! No conozco a nadie aquí,' y me las tenía que arreglar para volver a casa. Así que ellos me hacían cosas extrañas como esas, ellos me dejaban en un bar y se iban. ¡Esto se prolongó por cinco días!"
Después de todo eso, los U2 se acercaron a Joanou y le dijeron, "de acuerdo puedes hacer la película." Joanou dijo que hasta este día aun no conoce el criterio por el que lo contrataron, pero remarcó que hacer Rattle And Hum fue una "increíble experiencia." Haciendo una retrospectiva, describió a la banda irlandesa como enseñándole mucho estando en la ruta y en el estudio con ellos.
Rattle and Hum fue recibida con una reacción crítica cuando los críticos acusaron a la banda de ser demasiados pomposos y autosuficientes. Mirándola hoy en día, sin embargo, es una experiencia diferente ya que el Joshua Tree Tour (tal como se presenta aquí) se siente mucho más íntimo que cualquier otra gira que hayan hecho. Los números musicales son emocionantes de ver, especialmente en blanco y negro, y su viaje a través de la escena musical norteamericana nos da una serie de momentos inolvidables. Pero por otra parte, es especialmente grandiosa volver a verla en la pantalla grande de un cine. Las películas de conciertos como esta realmente necesitan ser vistas en pantallas grandes para apreciarlas completamente.
