"Fue como si hubiera nacido para enseñarle a una era una lección de humildad, humor y por sobre todas las cosas de paciencia. Al final, Nelson Mandela nos mostró cómo amar en vez de odiar, no porque nunca se haya rendido a la furia o a la violencia, sino porque aprendió que el amor haría un mejor trabajo. Mandela jugó con las apuestas más altas. Puso a su familia, a su país, a su tiempo, a su vida en la línea, y ganó la mayoría de estas contiendas. Testarudo hasta al final por todas las razones correctas, pareció que estuvo cerca de ver a los ojos a su creador. Hoy, finalmente, parpadeó. Y algunos de los nuestros lloran, sabiendo que nuestros ojos se han abierto tanto a causa suya."
Bono, líder de U2 y cofundador de (RED)
