Atenazados por los nervios y la falta de preparación, Bono, The Edge, Adam Clayton y Larry Mullen admiten sin excusas que aquella noche del 25 de abril de 1997, de la que ahora se cumplen 15 años, no ofrecieron precisamente el mejor de sus recitales. De hecho, Clayton sentencia: "El primer concierto de la gira 'PopMart' fue bastante malo, tropezamos en todas las canciones".
No son pocas las leyendas sobre ovnis en el árido y calenturiento desierto de Nevada. Tampoco fueron pocas las llamadas telefónicas que los oriundos de Las Vegas dedicaron a las autoridades alertando sobre luces, ruidos y fenómenos extraños durante el mes de abril de 1997 en el entorno del estadio Sam Boyd. Más de uno pensó que se había pasado con el peyote, pero en realidad se trataba de U2 ensayando a contrarreloj antes de presentar al mundo su nueva gran excentricidad: la gira Popmart.
Estas denuncias de ciudadanos despistados no pasaron de ser una anécdota, sin duda nada preocupante para una banda que pasó los días previos a su vuelta a los escenarios tras el exitoso Zoo TV Tour (1992-1993) soportando niveles de estrés en realidad insoportables. Y es que la demora en la grabación del álbum que daba soporte a la gira, Pop, provocó que el grupo no pudiera dedicarle suficiente tiempo a los ensayos, dando como resultado un primer concierto cuanto menos accidentado, el 25 de abril de 1997, del que ahora se cumplen tres lustros.
Según admite el bajista Adam Clayton en la autobiogrfía del grupo, U2 by U2, "el primer concierto fue bastante malo, tropezamos en todas las canciones". El mánager Paul McGuinness coincide y señala que cuando dieron el primer concierto en Las Vegas los chicos no habían "ensayado demasiado y gran parte de la tecnología no funcionó correctamente".
Para Larry Mullen, el problema estaba claro: "La gira estaba contratada antes de que el álbum estuviera terminado, una cosa un poco extraña para gente que está en el negocio desde hace tanto tiempo como nosotros". "Con el álbum terminado correctamente hubiéramos podido dedicarnos al show, al nuevo escenario y a todas esas cosas sin demasiados riesgos. El problema era que el disco no estaba preparado para respaldar aquellas nuevas y brillantes ideas", añade el baterista.
El error más garrafal de aquella noche, recordado siempre por los seguidores más acérrimos de U2, tuvo lugar durante "Staring At The Sun", canción que fueron incapaces de clavar a la primera. Tan perdidos se encontraron que en un momento dado Bono comienza a hacer aspavientos y ordena al resto que se detengan, pues no encontraban salida alguna a su descoordinación. Es tal cual, aquí está la prueba en video:
Adam Clayton sigue reconociendo más desaguisados relacionados con la velada del 25 de abril de 1997: "La pantalla real llegó muy tarde el mismo día del espectáculo. El vestuario había llegado la noche antes. Todavía estábamos decidiendo cómo tocar las nuevas canciones, no teníamos ni idea cómo interpretarlas en directo. Al mismo tiempo, el nuevo concepto de sistema de megafonía producía todo tipo de problemas de sonido, porque provocaba resonancias extrañas. Intentábamos descubrir cómo utilizar el escenario".
"La tecnología de la pantalla, que implicaba diodos de luz en 3D, acababa de ser instalada. Pensábamos que distanciando el LED podíamos doblar el tamaño de la imagen, así que era como un juego matemático con el que podíamos crear la pantalla más grande del mundo. Medía 45 metros de ancho por 15 de alto, diez veces mayor que la de Zoo TV. Se proyectaba un Andy Warhol gigante, se notaba la influencia de Claes Oldenburg y Roy Lichtenstein en el montaje, que jugaba realmente con la noción de música, arte y cultura pop", explica Clayton.
A este respecto, el bajista apunta que "el arco central (con forma) de McDonalds servía en realidad para sostener el sistema de megafonía, que en un espectáculo normal se encuentra a cada lado del escenario. Era una pieza de ingeniería muy elaborada que mantenía la ironía en referencia al supermercado, al concepto de centro comercial. El limón era un juguetito tremendo, daba vueltas, se abría y nosotros salíamos de su interior. Era una pieza muy kitsch, pero que funcionaba como auténtico interruptor del espectáculo, aunque en una ocasión durante la gira el limón no se abrió y tuvimos que salir por la escotilla de emergencia".
"Casi se podía oír cómo estallaba nuestro globo, eso sí, no sin sentido del humor", confiesa Bono con su habitual sorna volviendo sobre el debut en Las Vegas. Así, relata cómo durante "Discothèque", después de haber salido de su nave espacial con forma de limón y mientras descendían por las escaleras como "cuatro alienígenas del pop", Edge no podía ver los efectos de su pedal a través del humo. "¡Estoy aquí!", gritaba. Los gritos del guitarrista no es escuchan en este video, de la misma manera que tampoco se escucha su instrumento hasta que, efectivamente, comienza a desaparecer la nube que les envuelve.
Para Paul McGuinness, "uno de los problemas" de esta profesión es que la primera noche, "sea donde sea, siempre es minuciosamente analizada por la prensa de todo el mundo". Asimismo, The Edge señala que les costó "más o menos media gira" decidir cómo harían el espectáculo, aunque puntualiza que cuando dieron con la clave, "fue realmente extraordinario".
"Retiramos del repertorio de la primera noche 'Do You Feel Loved' y arreglamos de nuevo un montón de canciones como 'Discothéque', 'Staring At The Sun', 'Gone', 'If You Wear That Velvet Dress', 'Mofo' o 'Miami'. Las únicas que se salvaron de esta reestructuración fueron 'Please' (aunque con nuevo final) y 'Last Night On Earth', " prosigue el guitarrista.
En opinión de Bono, "cuando tocas en directo no hay tiempo para fantasías, o funciona o no, por lo que tu toma de decisiones se convierte en algo mucho más simple". "Los días en que el espectáculo funcionó fueron alucinantes. Su estructura de neón era fabulosa para una época en que la música rock representaba tanta angustia suburbana", añade.
Convertidos en auténticos mercaderes del pop, el concepto de la gira se basaba en una crítica sarcástica a la sociedad de consumo. Una vez superada la primera noche, U2 se encontró con otro problema inesperado: el bajo consumo de entradas en muchos conciertos de Estados Unidos, algo que después se fue corrigiendo progresivamente en Europa y que terminó de solucionarse gracias a que la gira visitaba lugares poco frecuentados como República Checa, Polonia o Latinoamérica.
Para The Edge, la explicación es más o menos sencilla: "En Estados Unidos aún dominaba el grunge y cuando pusimos las primeras entradas a la venta comenzaron a notarse las grietas. Algunas noches de Popmart fueron fantásticas, pero también hay algunas que me gustaría borrar. Es una experiencia bastante aleccionadora tocar ante un estadio con sólo medio aforo lleno o menos. La peor de todas fue Tampa, en Florida, con 20.000 personas en un estadio para 75.000".
Cuando la gira finalizó en marzo de 1998 en Johannesburgo (Sudáfrica), los miembros de U2 tuvieron sensaciones encontradas. Según The Edge, "Popmart empezó con algunas dificultades, pero acabó con buena nota, lo que nos dio una gran satisfacción". Para Adam y Bono también fue una gira "muy satisfactoria". Sin embargo, el siempre pragmático baterista del combo sentencia: "Yo estaba contento por cómo había salido todo, pero estaba todavía más contento de que hubiera acabado".
La gira tenía un coste de 250.000 dólares diarios, hubiera o no representación. En total fueron 93 conciertos que vendieron la nada despreciable cantidad de 3,9 millones de entradas, con una recaudación de 171,6 millones dólares. Unas cifras de récord a pesar de todo, inimaginables para la mayoría y que dejaron un evidente buen sabor de boca después de tan complicado arranque.
Con el paso de los años, U2 arrasaría estos registros en la gira 360º, que finalizó el 30 de julio de 2011 con 7,1 millones de espectadores y 517 millones de dólares de recaudación en 110 conciertos. La gira más rentable de la historia, con un espectáculo audiovisual también impresionante, pero con U2 ya pisando sobre seguro, lejos de los locos riesgos musicales que asumieron a finales de los noventa y que casi les hicieron perder los nervios. Jugar con los mercados es así de estresante.
FICHA DEL CONCIERTO INAUGURAL DEL POPMART TOUR
Lugar: Sam Boyd Stadium. Las Vegas. Estados Unidos
Artistas Invitados: Rage Against the Machine
Repertorio: Mofo, I Will Follow, Even Better Than The Real Thing, Do You Feel Loved?, Pride, I Still Haven't Found, Last Night On Earth, Gone, Until The End Of The World, If God Will Send His Angels, Staring At The Sun, Daydream Believer, Miami, Bullet the Blue Sky, Please, Where the Streets Have No Name.
Bises: Discothèque, If You Wear That Velvet Dress, With or Without You, Hold Me Thrill Me Kiss Me Kill Me, Mysterious Ways, One.Fuente: RollingStone.es