"See the world in white and blue, Buenos Aires right in front of you"
"In the City Of Buenos Aires"
"My Beautiful Day"
01-03-2006
Lugar: Estadio River Plate
Setlist:
01. City Of Blinding Lights
02. Vertigo
03. Elevation
04. Until The End Of The World
05. New Year's Day
06. I Still Haven't Found What I'm Looking For
07. Beautiful Day
08. The First Time
09. Sometimes You Can't Make It On Your Own
10. Love And Peace Or Else
11. Sunday Bloody Sunday / Rock The Casbah (Fragmento)
12. Bullet The Blue Sky / When Johnny Comes Marching Home (Fragmento) / The Hands That Built America (Fragmento)
13. Miss Sarajevo
14. Pride (In The Name Of Love)
15. Where The Streets Have No Name
16. One
17. Zoo Station
18. The Fly
19. Mysterious Ways
20. With Or Without You
21. Fast Cars
22. Yahweh
23. All I Want Is You
24. Love Is Blindness
Hoy U2 realizó el primero de dos conciertos en Buenos Aires, Argentina. A pesar que el setlist fue muy similar al de Santiago, este tuvo varias diferencias sorprendentes. La primera es la inclusión de "Fast Cars" por segunda vez en lo que va del 4° tramo de la gira, la segunda es la omisión de "Mothers Of The Dissapered" (que había sido tocada en los tres conciertos anteriores en Argentina en 1998), y la tercera viene al final del show. Como "All I Want Is You" había concluido, Bono comienza a cantar "Love Is Blindness" y toda la banda se le une para interpretar una breve pero emocionante versión de este tema. "Love Is Blindness" fue interpretada en vivo por última vez en diciembre de 1993 en Tokyo en el show final del ZooTV Tour, y como snippet el 10 de abril de 2001 en Calgary.
La banda brilló en su primer recital
Más de 70.000 personas disfrutaron del show en River; esta vez no hubo incidentes
Con "City Of Blinding Lights", "Vértigo" y "Sometimes You Can´t Make It On Your Own", todas de su último disco, "How To Dismantle An Atomic Bomb" (Cómo desarmar una bomba atómica), la banda irlandesa U2 comenzó anoche su impactante primera presentación en Buenos Aires en el estadio de River Plate ante una audiencia estimada en más de 70.000 espectadores.
Esta vez no se produjeron los incidentes que se vivieron en los dos recitales de los Rolling Stones, la semana última. En esta segunda visita a la Argentina (la primera fue en 1998, en el marco del Pop Mart Tour), Bono, The Edge, Adam Clayton y Larry Mullen vinieron a presentar, a lo largo de dos horas, las canciones de su último disco, pero también un gran listado de una veintena de clásicos, como "Where The Streets Have No Name", "One", "Mysterious Way" y "Sunday Bloody Sunday".
A las 22.15, Bono apareció envuelto en una bandera argentina y saludó a su público en español: "Gracias por darnos una gran vida y por esperarnos. Los argentinos pasaron por momentos por momentos y dificiles, pero ahora es la nueva Argentina".
Como en todo el "Vértigo Tour" por América latina, la banda ofreció un espectáculo impactante desde la música, con un sonido de 100.000 watts de potencia, y también desde la imagen.
Una semana había comenzado a prepararse el escenario de 25 metros de largo por 60 de profundidad. En el fondo, una pantalla gigante de nueve metros de alto y de última tecnología conformada por unas 12.000 lámparas disparaba imágenes psicodélicas, palabras, banderas de los distintos países de América latina y distintos planos de la banda. El concierto también tiene su color político en varios temas, como "Miss Sarajevo", y se preveía que Bono hiciera varias alusiones a la política argentina tras su encuentro con Néstor Kirchner ayer por la tarde (ver aparte), como viene haciendo en distintos tramos de la gira latinoamericana, donde también se encontró con los mandatarios Lula y Ricardo Lagos, de Brasil y Chile, respectivamente.
Para que sus fans pudieran ver a la banda desde todos los sectores del estadio se montaron dos pantallas laterales y dos frontales, para poder seguir de cerca todo los movimientos de Bono, líder de U2, y del guitarrista The Edge, el otro pilar de la agrupación.
Fuera del estadio un operativo de unos 500 agentes de la Policía Federal y gente de seguridad controlaba los accesos al concierto.
Las puertas se abrieron desde las 15, cuando se repartieron los números para los privilegiados espectadores que formarían parte del "círculo dorado", un lugar reservado donde unas cuatro mil personas quedan dentro del espacio enmarcado por la pasarela semicircular que se extiende desde el escenario.
Fuente: LaNacion.com.ar