Bono: “Mucho ha cambiado en una década”

10 años atrás, Facebook existía en una computadora de un dormitorio de una universidad. No había tuits, hashtags o iPhones. Las únicas personas que ocupaban Wall Street usaban trajes y el Tea Party tenía un acento del Boston colonial. Y ONE eran solo algunos.

El proyecto se inició principalmente, a decir verdad, porque nos lo pidió Nelson Mandela y el arzobispo Desmond Tutu. Y realmente... ¿quién podía decirles que no?

Lo que se necesitaba, pensaban ellos, era una demostración de apoyo al mundo más pobre... ciudadanos de todo el mundo de pie en solidaridad con el otro y pidiéndoles a los líderes que hicieran algo más que ayudara y menos que lastimara a las personas más vulnerables del planeta.

Y así, nació ONE.

Algunos de nosotros nos reunimos cerca de la Campana de la Libertad en Filadelfia para lanzar una campaña para sacar a millones de la pobreza. Sabíamos que cada persona podría hacer una diferencia, pero creíamos que si trabajábamos juntos como ONE (“uno”), podríamos cambiar al mundo.

10 años después, estoy impresionado con lo que hemos logrado, trabajando juntos a través de continentes e ideologías, y manteniéndonos firmes a la creencia que la lucha contra la pobreza no trata de caridad, sino de justicia e igualdad.

La condonación de la deuda para docenas de países en África ha ayudado a poner a 54 millones más de niños en la escuela. La ayuda se hizo más efectiva y responsable. Las duras leyes ayudaron a garantizar que el petróleo, el gas y los minerales bajo tierra en los países más pobres no fueron robados por las personas que viven encima de ellos. 7.5 millones de personas en África están prosperando con los fármacos antirretrovirales; los índices de muerte por la malaria han sido disminuidos a la mitad en 13 países del continente. Los líderes políticos de izquierda, derecha y centro fueron alcanzados por llamadas, cartas, reuniones públicas y tuits y forzados a tomar una posición acerca de la lucha contra la extrema pobreza.

El lema de ONE es una de las pocas cosas que ha permanecido igual: “No estamos pidiendo tu dinero. Estamos pidiendo tu voz.” Así que hoy, 10 años después, queremos agradecerles por usar sus voces, sea a través de un clic, de un correo electrónico, una carta, un llamado telefónico, una conversación, una demostración, un sentada, una parada...

Sus voces juntas, eso ha hecho toda la diferencia.

Gracias.
Bono.

Fuente: ONE.org