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Songs Of Experience nos provee de una genuina razón para enamorarnos nuevamente de U2

Después de un evento misterioso que le cambió la vida, Bono dice que la historia de U2 es demasiada valiosa y que no pueden separarse o morir

En el invierno europeo pasado, algo le sucedió a Bono que cambió todo.

No tuvo nada que ver con su serio accidente de bicicleta de New York o con su aparición en los Paradise Papers.

Fue, literalmente, una cuestión de vida o muerte.

En sus notas para el disco nuevo de U2, el orientado hacia el futuro y afirmador de la vida, Songs Of Experience, el cantante menciona su roce con la mortalidad, un susto en la salud que lo sacudió hasta el corazón.

Yo mismo recibí un shock a mi propio sistema, un shock que me dejó aferrándome a mi propia vida como a una balsa, escribe.

Es una experiencia que te detiene.

Se describe frente a una pared con mis manos sobre mi cabeza… la fuerza gritándome que no me mueva.

Como ahora sabemos, la vida continua para el irlandés de 57 años, que comanda el escenario mundial pero que de repente se siente tan vulnerable.

Bono mantiene una firme cubierta sobre los detalles exactos, pero me ha permitido acceder a su corriente de pensamiento acerca de su trauma de cuerpo y mente.

No me detendré en eso, agrega. No quiero nombrarlo. En un mundo de reality televisivo de melodramas menores/mayores, puedo evitarlos a todos.

Debemos respetar su derecho a la privacidad médica, pero está claro que Songs Of Experience es un disco diferente por lo que le pudo suceder.

Aunque se siente fantástico ahora, más fuerte que nunca, sugiere que las canciones tienen un impulso detrás de ellas que demuestran la turbulencia que estuve sintiendo al momento de componerlas.

El disco refleja una crisis de fe en Bono por la que tuvo que luchar aun más fuerte y reconoce un mundo cambiando en su eje político, donde los extremos están reemplazando la tolerancia, donde la democracia está bajo asedio.

La Costa Oeste, referenciada en Summer Of Love por ejemplo, no está ubicada en la familiar y opulenta costa norteamericana, sino que en el Mediterráneo donde el conflicto de Siria alimenta a Europa de la devastadora crisis de refugiados.

Mientras el tema parece pesado, el disco está lleno de ganchos melódicos, letras sinceras y voces al mando, todo esto dando un lustre brillante y vibrante por los productores en jefe, Ryan Tedder (Adele, Beyonce) y Jacknife Lee (The Killers, Snow Patrol).

La semana pasada, estuve hablando con dos aliados de Bono, el guitarrista The Edge, por teléfono desde Los Angeles, y el bajista Adam Clayton, en una tranquila esquina de un pub en Maida Vale, Londres.

Están encantados con el disco nuevo, del que creo que es el mejor disco de U2 desde el cambio de siglo, pero reconocen el reciente stress en su frontman.

En 2014, cuando me reuní con los cuatro miembros, en una idílica y soleada mañana de otoño, en el sur de Francia, ellos hablaban de un rápido compañero de Songs Of Innocence.

Pero el enorme interés en el 30º aniversario de The Joshua Tree, con su extendida lista de conciertos festivos, fue solo un factor detrás de un largo período de gestación.

Cuando se trata de las complejidades de la maquinaria de U2, encuentro que The Edge es el que ofrece claridad y perspicacia.

Explica: Nos habíamos apresurado a tener Songs Of Experience para sacarlo a finales de 2016. Pensamos que casi lo teníamos finalizado… entonces un par de cosas sucedieron.

El Brexit y las elecciones de Estados Unidos arrojaron una luz completamente diferente, y Bono estuvo pasando por algunas cuestiones que tenían que ver con su salud que eran bastante profundas.

No estaba físicamente bien y se encontraba en un lugar en el que quería reconsiderar las letras.

A través de una combinación del clima global en el que se iba a lanzar nuestro disco y nuestras cosas personales, no parecía correcto salir tan de prisa.

Simplemente pensamos, ‘Tenemos que darnos un poco más de tiempo.’ Necesitábamos estar seguros que el disco estaba bien.

Clayton, elegante y cautivador como siempre, también elude el trastorno de Bono, pero amplia la discusión a toda la banda.

Estamos entrando en ese período de nuestra vidas en donde la gente puede morir de repente, dice.

Están teniendo enfermedades y piensas, ‘My Dios, no creí que eso le pudiera suceder a nuestra generación’.

Llega un momento en el que tenemos que cultivar un sentido de gratitud de que aun estamos aquí y, quizá, no tener enormes expectativas sobre la próxima semana, o mes, o año.

La historia de esta banda es preciosa y nos dimos cuenta que no necesitamos romper, no necesitamos morir, y que el legado de lo que hacemos debe continuar. En las notas de Bono, habla de ser desafiado por su amigo, el poeta Brendan Kennelly a escribir como si estuvieras muerto.

La mortalidad está en su mente cuando dice sobre las canciones nuevas: A muchas de ellas me acerqué con la sensación de que quizás no esté por ahí para escucharlas en la radio o en esas cosas de streams.

He perdido a muchos de mis héroes, Leonard Cohen, David Bowie, Prince… había pensado mucho acerca de no estar ahí, así que hice estas canciones como cartas de amor.

Hay cartas afectuosas para la esposa y amor de la vida de Bono, Ali, tituladas You’re The Best Thing About Me y Landlady.

El término Landlady, un título de canción que creerías un tanto extraño [Casera], es usado porque Ali pagaba la renta cuando los cuatro soñadores sin plata se machacaban en una van golpeada tratando de hacer a U2.

La contagiosa Get Out Of Your Own Way, que seguramente se convertirá en un himno en vivo, está llena con esperanzas y miedos de un padre para con sus hijas Eve y Jordan, completa con una coda dirigida a sí mismo incluyendo esta sorprendente línea…

Bienaventurados los asquerosamente ricos, porque solo puedes poseer lo que regalas… como tu dolor.

The Little Things That Give You Away, señala y autocritica, habla de las palabras que no puedes decir, tu gran boca en el camino y es la carta del cantante a sí mismo.

Y Love Is Bigger Than Anything In Its Way, da consejos conmovedores a los hijos de Bono, Eli y John, a lo que Clayton dice que tiene esa clásica vibra de ‘Father And Son’ de Cat Stevens.

The Showman (Little More Better) se dirige a las legiones de fieles fans de U2 y es, dice Bono, una carta para cualquiera que se enamore de la fanfarronada del artista con demasiada/poca confianza.

Dimos a luz estas canciones, pero es nuestro público quienes le dan vida y significado a ellas, resuelve.

Dos canciones tienen la palabra luz en el título, Lights Of Home [Luces Del Hogar], compuesta en conjunto con la banda de chicas Haim, y 13 (There Is A Light) [13 (Hay Una Luz)], que obtiene esta explicación de Clayton.

Hay un montón de canciones acerca de la luz en el repertorio de U2. Es una imagen de fe y, obviamente, la gente estando cerca de experiencias mortales describe ver una luz brillante. Así que estos son temas de los que se habla.

Lights Of Home no podría ser más clara, abriendo con el sentimiento: No debería estar aquí porque debería estar muerto. Puedo ver las luces frente a mí.

Mientras los sentimientos personales recorren las canciones como sangre fluyendo por las venas, también hablan en un nivel universal. Podría ser cualquier compañero, cualquier niño, cualquier miedo, cualquier peligro, cualquier esperanza.

Se exploran temas más amplios en The Blackout, basada en batería y bajo, que comenzó, como The Edge lo explica, como una canción acerca del accidente de Bono, pero que se reescribió para explorar el colapso de la democracia.

Sin embargo, no todo es sombrío, como lo explica Bono en sus notas: ‘Sin embargo, si quieres ver a las estrellas,’ dice Annie Dillard (autora norteamericana), ‘encontrarás que la oscuridad es necesaria.’

American Soul, una de las dos canciones con la especial participación del voluptuoso rapero Kendrick Lamar, retoma una noción familiar de Bono… que los Estados Unidos no es solo un país sino que una idea, una que está severamente comprometida.

Sobre Red Flag Day, inspirada en los refugiados, The Edge dice: Originalmente, estaba en la pila de canciones que no serían parte del disco, a principios de este año, la hicimos una prioridad, porque había algo muy poderoso en ella.

La tapa del disco, realizada por el fotógrafo de U2, Anton Corbijn, resume lo que está dentro con el hijo de Bono, Eli, de la mando de Sian, la hija de The Edge.

La inocencia está representada por los pies descalzos, pero el mundo problemático está a la vista al simbolizarse por el casco militar M1 de Estados Unidos posado en la cabeza de Sian.

The Edge, dice: Sabíamos que queríamos algo que resonara con Songs Of Innocence, que tiene a Larry y a su hijo. El casco es el punto. Si solo hubieran sido ellos dos, hubiera sido como un poco meloso pero el casco militar le da un poco de tensión.

También nos da una conexión al disco War, así que la iconografía de U2 está siendo reutilizada. Tiene una combinación de inocencia y algo más que está sucediendo.

A pesar de evocar una creciente sensación de inquietud, el disco es notable por el sonido agradable de muchas canciones. Son canciones apropiadas, coincide The Edge.

Aunque ciertas canciones son bastante intensas, un sello distintivo de este disco es que es muy accesible, tiene mucho de vitalidad y poder melódico.

Si al menos un puñado de ellas no terminan convirtiéndose en 20 años en alimento para pianistas de salón de Holiday Inn, o música ambiental en un ascensor, entonces habremos fallado. Queremos que este material entre en el lenguaje.

Es bastante aparente que el retraso y el subsecuente reinició del disco le ha dado una frescura y urgencia que, de otra manera, le podría haber faltado.

De alguna manera, la banda ha logrado capturar algo de lo tenso y menos complicado sonido en vivo de U2 en el estudio.

Clayton sugiere que la observación general para Songs Of Experience es afirmativa y positiva.

Todos sentimos que no hemos terminado, revela. Hay una gran cantidad de personas de edad que creen que no pueden hacer rock and roll después de una edad de 35 años, pero eso no es verdad. Puedes ser muy subversivo en la vida posterior.

El adolescente fue una invención de los cincuenta y el enfoque fue una expresión de adolescencia. Olvidamos que todos los demás tuvieron experiencias maravillosas, también. Songs Of Experience es un intento de U2 de ser dueños de nuestra edad.

Clayton continua, ha habido un intento de mirar hacia atrás en nuestra posición, que está enrarecida de muchas maneras, pero también hay humanidad en nuestra experiencia compartida.

A los 57, ves el tiempo por delante tuyo de forma diferente al tiempo detrás tuyo.

La última palabra es con Bono, que escribe: Quise sumergirme desnudo en estas canciones de la experiencia, no solo nadar desnudo en las que amo, quise sacarme la piel.

Estar constantemente en el centro de la atención ha hecho de U2 un blanco fácil. Solo piensa en la reacción negativa a Songs Of Innocence con respecto a la alianza con Apple o el reciente escándalo fiscal de su cantante.

Pero Songs Of Experience nos provee de una genuina razón para enamorarnos de nuevo con cuatro oportunistas (palabra de Bono, no la mía) de Dublín que lo hicieron a lo grande.

Fuente: TheSun.co.uk

CANCIONES DE LA EXPERIENCIA

Comienzas al final
Comienzas vacío
Empiezas con nada
Empiezas con el vacío

El amor es todo lo que nos queda…

Tal vez fue el Dalai Lama quien dijo que cualquier meditación sobre al vida tiene que empezar con uno en la muerte. Suena un poco triste. No a mi. Perdí a mi madre cuando tenía 14 años y aprendí mucho de su partida. Desearía que nunca hubiera pasado, desearía haber sido mayor pero como un adolescente, mirando fijamente al vacío, ahí fue donde cierta fuerza vital cobró impulso en mí, cuando comenzó un cierto desafío.
Desafiar las probabilidades, desafiar las expectativas de las personas, desafiar la muerte… por sí mismo.
Despojar de su poder sobre mi o sobre cualquier otra persona.
(Era exagerado incluso entonces…)
Recuerdo leer “y la muerte no tendrá el dominio” de Dylan Thomas.
Gran poema. Creí eso. Aun lo hago.
En algún lugar del camino descubrí a la alegría como un acto de desafío… y el desafío era la esencia del romance.

Nada que impida que sea el mejor día de todos,
nada que nos mantenga lejos de donde deberíamos estar.
Yo quería el mundo, pero tu lo sabías mejor,
y todo lo que tenemos es inmortalidad

La banda ha pasado muchos veranos en el sur de Francia, es un lugar que nos ha salvado de nosotros mismos, nos reintrodujo al amor en nuestras vidas, a nuestras familias, a nuestra música. Noches que se ponen juguetonas con las mañanas, tardes con el sol batiendo a la basura del día. El sol burlándose de nuestro irlandismo de que solo somos blancos. Somos rozados.
El Mediterráneo se sienta allí como un lago, trayendo calma que raramente encuentro en otra parte. Pero en los últimos veranos, ha habido un cierto presentimiento de lo que solía ser un horizonte tan plácido. Ya sea que podamos verlo o no, una vez que leímos las noticias y vimos las imágenes, pudimos sentirlo.

La guerra en Siria estaba justo al otro lado del agua.

Cuando todo está perdido descubrimos lo que queda,
oh, los mismos océanos cruzados,
para algunos es placer, para otros es pena.

He estado pensando sobre la Costa Oeste…

La costa oeste de Siria, en el mismo mar Mediterráneo, donde vimos a enfermeras y maestros, personas que se parecían mucho a nosotros sosteniendo fuerte a sus hijos, a unas pocas posesiones, aferradas a casi nada. A una esperanza, a un sueño de otra costa, un bote de goma, paletas de madera. Restos humanos arrastrándose en Turquía o Italia, quién sabe dónde…

Adam dirigió la atención de la banda al fotógrafo y cineasta Richard Mouse y a su instalación en Brooklyn, usando lentes termales militares filmó las vidas fantasmales de los refugiados. Nos dejó sin palabras. Una sombría pero extraordinaria visión. Así que el disco tiene dos canciones de amor con nubes fuertemente oscuras sobre ellas.
Cielos de petróleo.
Hermosos pero inflamables.

Summer Of Love
Red Flag Day

El invierno pasado yo mismo recibí un shock a mi propio sistema, un shock que me dejó aferrándome a mi propia vida como a una balsa.
Muchos de nosotros tenemos un roce con la mortalidad en algún momento, ya sea en nosotros o en alguien querido. Es una experiencia que te detiene.
Estuve detenido.
Frente a una pared con mis manos sobre mi cabeza… la fuerza gritándome que no me mueva.
No me voy a detener en esto ni extenderme. No quiero nombrarlo. En el mundo del melodrama de reality de la TV puedo evitarlos a todos.
Me siento fantástico ahora, más fuerte que nunca, pero estas canciones tienen su impulso detrás de ellas y se sentiría deshonesto no admitir la turbulencia que estuve sintiendo al momento de escribir.

El genio que yace detrás del genio de John Donne y el genio de unos pocos humanos me llevaron a salvo a la orilla, pero confieso, que en el camino, la fe que había guiado mi vida desde que era un joven, no solo no se profundizó. Fue superficial.

Tuve que pelear aun más duro por esa fe.
Para comprender “la pequeña voz quieta”.
Tuve que derribar las pantallas en este mundo.
Silenciar los sonidos de fondo y de primer plano. La interferencia.
Bajar el volumen de mi atestada mente para escuchar esa tranquila y suave voz que promete “la paz que sobrepasa todo entendimiento”.

Esa relación que tienes con Dios o lo que sea que quieras llamar Dios, es una relación que solo cede a la veracidad.
Tuve que enfrentar algunas mentiras que me había estado diciendo a mi mismo… mentiras como “mi cabeza era más dura que la tierra”. Hubo otros. Tuve que enfrentar a mi propio miedo y mi miedo al miedo mismo.
No hago eso muy fácilmente.
Pero la voz pequeña retornó, la que había escuchado por primera vez en la infancia.
El lenguaje es difícil de traducir, pero la remera dice: “libérate, para ser tu mismo, si solo pudieras verte a ti mismo.”
La voz de Iris, la voz de Dios, la vos de la amistad, ¿quién sabe?
Es poderosa. Es perspectiva.
El momento de regresar a casa. Para descubrir no que era un lugar. Eran rostros. Era más que unas pocas caras, pero su corazón fue mi hogar.
Ali.
La luces del hogar.
Siempre he sabido que la alegría no se puede forzar, eso es una fuente de una vida siendo vivida y siendo amado.
En el mensaje, la traducción de Eugene Peterson de la biblia, leí el salmo 100: “ingresa con la clave ‘¡gracias!’ y siéntete como en casa.”
Qué linea.
Fui en busca de la alegría que no se puede fabricar, que no está de la mano con la voluntad. La facilidad es mucho más fácil de falsificar.

Una píldora, una promesa, un caballo pasando de 10 a 1, un hermoso rostro para descubrir, una noche en la ciudad, risotadas con amigos geniales…
La alegría es algo diferente.
La música genial tiene alegría… los Beatles, Mozart, Beethoven, Aretha… The Ramones… hay tantos, no hay una lista definitiva.
La alegría incluso estalla de la furia.
“La ira es una energía,” cantó Johnny Lydon en los 80 con su banda Public Image Ltd. cuando U2 aun se estaban buscando.
Rabia contra la máquina.
“Rabia, rabia contra la muerte de la luz,” dijo Dylan Thomas. Ahí es donde la rabia vive.

Antes de empezar a escribir estas canciones de la experiencia decidí asumir el desafío del grandioso poeta, Brendan Kennelly. “Si realmente quieres llegar a donde la escritura vive,” me desafió. “Escribe como si estuvieras muerto.”
Es un desafío ir más allá del ego, más allá de preocuparme de cómo tus palabras afectan a las personas que te rodean.
Prioriza lo que deberías decir si crees que éstas pueden ser tus últimas aseveraciones.
Pensé que era una buena idea –hasta el momento en el que no era solo una idea con la que estaba jugando. Fue como una realidad que estaba jugando conmigo.
Me gustaría que las personas que escuchen estas canciones sepan que a muchas de ellas me acerqué con la sensación de que quizás no esté por ahí para escucharlas en la radio o en esas cosas de streams.

He perdido a muchos de mis héroes. Leonard Cohen, David Bowie, Prince… había pensado mucho acerca de no estar ahí, así que hice estas canciones de amor.

American Soul es una carta a Estados Unidos.
Un país que todavía se está inventando y reinventando, que ha sido la musa de esta banda desde la primera vez que vinimos de gira en los 80.
Y todos leímos Motel Chronicles de San Shepards, escuchamos a Patti Smith y llegamos a conocer al gran poeta Allen Ginsberg. Por años he estado molestando en el trasero de quien quisiera escuchar, tratando de explicar que Estados Unidos no es solo es un país, es una idea. Es una gran idea, también.
Pero mientras grabamos estas canciones sentimos que la de idea de Estados Unidos estaba siendo desafiada, incluso retorcido, en formas recientemente problemáticas.
El crecimiento de la derecha no es una sorpresa –está sucediendo en todo el mundo–pero verlo en los Estados Unidos, ver al Ku Klux Klan marchando en las calles de Charlottesville, sin esos disfraces y sombreros puntiagudos estúpidos, eso fue un nuevo nivel de absurdidad y peligro. Edge le describió como “la enfermedad mental del racismo” desenmascarada. ¿Por qué se sentían tan envalentonado? Hablar de prohibir a los musulmanes de Norteamérica por miedo a una amenaza terrorista sería como los británicos en los setenta y ochenta prohibiendo a todos los irlandeses en el Reino Unido. Por miedo a que uno de nosotros estuviera con el IRA. Por supuesto, que podríamos –pero no se puede prohibir el aire porque contiene un virus. Y así vimos la traición a aquellas palabras de Emma Lazarus, al pie de la Estatua de la Libertad, grandes palabras “dame tus cansados, tus pobres, tus masas acurrucadas anhelando respirar libremente…”
Sí, se sintió como una traición.

Cartas de amor…
The Showman es una carta de amor para cualquiera que se enamore de la fanfarronada del artista con demasiada o poca confianza, ya sabes, ese fenómeno, ¿de demasiada/poca confianza?, como sea, es una carta para cualquiera en el público. Dimos a luz estas canciones, pero es nuestro público quienes le dan vida y significado a ellas. La relación de artistas y público en U2 es un romance enloquecedor pero también es un desafío. Tiene que serlo. Hay un acuerdo. No tenemos que preocuparnos sobre a dónde van a ir nuestros hijos a la escuela o cómo afrontar las vacaciones familiares, pero a su vez nuestro público no tiene que preocuparse de que la banda no va a dar todo lo que tiene. (Le toma a U2 todo un tiempo finalizar nuestros discos, completar canciones, debido a esto.)
The Showman fue un gran demo pero solo se volvió una gran canción cuando Larry se sentó detrás de la batería y, en una sesión, logró toda otra toma de la canción.

Desde el principio, con Larry, Adam y Edge hemos firmado ese trato y difícilmente haya algo en el que no sea eso cierto, pero este conjunto de canciones nos costaron más de lo que esperábamos. El ego se vuelve menos maleable a medida que envejeces, ¿no es cierto? Mientras pusimos en forma a las canciones, ¿nos estábamos saliendo de nuestra forma? Creo que sobrevivimos, pero la mejor música de U2 ha salido de esa pregunta. Entonces, otra vez, los cantantes son las últimas personas que deberías escuchar cuando no están cantando. Los artistas son las últimas personas en las que puedes confiar en cuestiones relacionadas con su performance. Podemos reír cuando las cosas no son divertidas, podemos llorar en primer plano.
Miento para vivir
me encanta fingir
pero tu me haces verdadero
cuando cantas…

Cartas.
Hay cartas a los hijos e hijas.
Love Is Bigger Than Anything In Its Way
13 (There Is A Light)
Get Out On Your Own Way
A la compañera, a Ali.
You’re The Best Thing About Me (por supuesto, esa es fácil).
Está The Landlady (por supuesto).
La casera que me eleva en el aire, voy, voy a donde no me atrevo
Quien pagaba antes que tuviera dos peniques, quien proveía una cama y no se aburría cuando este escritor estaba escribiendo sobre si mismo. La pregunta que no podía sacarme la cabeza era ¿podría componer una canción para Ali, una canción de amor, una canción de exhortación, sin inducir el proyectil de vómito que es el sentimentalismo? Es difícil, quizá la humildad, si pudiera recordar qué era eso, ayudaría. ¿Humor?
Y nunca lo sabré
nunca sabré lo que piensan los poetas hambrientos
porque cuando estaba quebrado
fuiste tu la que siempre pagó la renta.

He estado gritando
qué tan malo puede ser un buen momento
disparando a mi boca…
Esa es otra gran cosa acerca de mí…
“Nunca sobreestimes el ego masculino cariño,” como lo expresó Marianne Faithfull. La crisis de medians edad de pensar que no la estás teniendo.
El amor siempre ha sido nuestro tema número uno, pero las dos canciones extras del disco no.
Tan frío como un contrato es el libro de tu corazón.
Quise escribir acerca de la pasión fría. Releí The Fisherman de Yeats donde habla de su deseo de una poseía “tan fría y apasionado como el amanecer”.
Traté de pensar a través de eso.
Esa es la belleza de la cicatriz
Ese es el contrato del corazón.
Es una especie de referencia al matrimonio, al compromiso de las relaciones. Hay un costo para las promesas hechas en el amor joven, pero que al final el costo nunca es lo suficientemente alto, ¿no es cierto?
(Pero vale la pena.)

Si está en algún lado, la escritura inteligente siempre descubre al escritor y quise sumergirme desnudo en estas canciones de la experiencia. No solo nadar desnudo en las que amo. Quise sacarme la piel.
Actuar siempre es como un striptease, pero escribir te descubre cosas que no sabías que llevabas puesto. Te expones. No estaba seguro que quien estaba hablando cuando escribía The Little Things That Give You Away, hasta que me di cuenta que era yo mismo y eso era un diálogo entre mi inocencia y mi experiencia. La inocencia arengando a la experiencia hasta que la experiencia se colapsa.
Te vi en las escaleras,
no te diste cuenta que estaba ahí.
Eso es porque estabas hablando
a mi y no a mi.
Un huracán está naciendo,
pero esta libertad
puede costarte tu libertad.

Hey, este no es momento para no estar vivo…

En el otro extremo de la experiencia, a través de la sabiduría, esperamos recobrar la inocencia. Alguien lo ha llamado “la segunda ingenuidad”.

El amor es todo lo que nos queda…
Un bebé llora desde el umbral de la puerta… lo único que se puede mantener.

The Blackout es una carta para el momento en el que estamos, la combinación de apocalipsis tanto personal como político. No solo el mastodonte del rock masacrado por el tiempo sino que también la democracia de los dinosaurios enfrentando la extinción.
¿Suena como melodrama? Bueno, ¿no es eso lo que queremos de la ópera? Grandes melodías, grandes emociones.
No creo que sea disparatado.
Después de todo, la democracia es un mero incidente en la historia. ¿Liberté, égalité, fraternité, no es una condición humana? Es una aspiración lograda por revoluciones sangrientas. Es un negocio sangriento y desordenado. Como en un trauma personal pero con distopía política. El apagón.
En la oscuridad,
donde aprendes a ver,
cuando las luces se apagan,
nunca lo dudes,
la luz que podríamos realmente ser.

“Sin embargo, si quieres ver las estrellas,” dijo Annie Dillard, “encontrarás que la oscuridad es necesaria.”
Es en la oscuridad donde realmente nos vemos a nosotros mismos.
Donde encontramos lo que somos.
Cuando nos quedamos con nada.

Comienzas al final
Comienzas vacío
Empiezas con nada
Empiezas con el vacío

Bono.

En su nuevo álbum, Songs of Experience, U2 ofrece consejos sin cinismo

Quienes no pueden soportar el lado serio de U2 que busca curar al mundo, podrían querer dejar de leer esto. La palabra “amor”, sin ironía y noble, aparece a lo largo de Songs of Experience, la secuela de larga gestación de su álbum de 2014 Songs of Innocence.

Mientras que Songs of Innocence estaba lleno de detalles biográficos joviales —tanto eufóricos como sombríos— de Bono, el cantante y principal compositor del grupo, Songs of Experience tiene una perspectiva más general, amplia y adulta. Le da preferencia a las lecciones y los arquetipos, no a las historias. Al igual que Songs of Innocence, el nuevo álbum contó con varios productores, y U2 claramente evaluó cada nanosegundo de sonido, ya fuera puliendo sus reverberaciones o administrando cantidades calibradas de distorsión. No es un álbum que corteje a nuevos fanáticos al cambiar radicalmente el estilo de U2: en vez de eso, reafirma el sonido que ha estado llenando estadios y coliseos durante décadas.

El disco también es un regreso al mercado comercial estándar. Apple hizo que Songs of Innocence fuera un regalo que de pronto apareció en los archivos tanto de fanáticos como de no fanáticos en todo el mundo. Muchos lo consideraron una invasión corporativa en vez de un regalo, lo cual generó una respuesta negativa que amenazó con eclipsar las respetables canciones del álbum. Songs of Experience, el decimocuarto álbum de estudio de U2, tiene un lanzamiento más convencional.

Bono ha descrito Songs of Experience como una colección de cartas a la familia, los fanáticos y Estados Unidos: mensajes y advertencias de un personaje público con una mentalidad global. Durante gran parte de la producción, U2 se dispone a contrarrestar la furia, la desolación y el escepticismo de 2017 con grandes dosis de optimismo.

Hay una tentación de predicar y algunas de las canciones son homilías descaradas. Las canciones de inicio y cierre del álbum (antes de la canción extra) se llaman “Love Is All We Have Left” y “Love Is Bigger Than Anything in Its Way”. La canción con la que inicia es una bendición celestial que se desarrolla por encima de cuerdas trémulas, y declara: Nothing to stop this being the best day ever (No hay nada que evite que este sea el mejor día de la historia), mientras que el final es el gran crescendo de una marcha, un himno de estadio en el que dicen: When you think you’re done, you’ve just begun (Cuando crees que estás acabado, tan solo estás empezando).

Sin embargo, en medio, hay más ambivalencia, humor, autocuestionamiento y un propósito explícitamente político. “You’re the Best Thing About Me”, con ese alegre salto en su melodía y la guitarra veloz de The Edge en el centro, es una canción de amor que se convierte en una advertencia: Las mejores cosas son fáciles de destruir. El ritmo alegre al estilo de la década de 1950 de “The Showman (Little More Better)” le da a Bono un trampolín para burlarse de su papel como cantante pop: Making a spectacle of falling apart is/ Just the start of the show (Hacer el espectáculo de desintegrarse/ solo es el inicio del show).

Mientras tanto, U2 ha estado pensando mucho en los migrantes. “Red Flag Day” —con los veloces acordes sincopados de la guitarra rítmica de The Edge, el bajo de Adam Clayton y la batería de Larry Mullen Jr. que se funden como The Police— comienza como un jugueteo en un paraíso mediterráneo en la playa, pero termina con una reflexión acerca de los migrantes ahogados en esas mismas aguas.

El ritmo con un tono aterciopelado de “American Soul” comienza como un tributo de la banda irlandesa al rock estadounidense, pero después alaba la idea de que Estados Unidos pueda darle la bienvenida a los extranjeros de todo el mundo: For refugees like you and me/ a country to receive us/ Will you be my sanctuary/ Refu-Jesus! (Para refugiados como tú y como yo/ el país que nos reciba/ será mi santuario/ ¡Refu-Jesucristo!”).

Sin embargo, incluso la fe y la esperanza de U2 tiene sus límites en la era del brexit y de Donald Trump. “The Blackout” tiene un ritmo aplastante de cuatro sobre la pista y un efecto de guitarra que recuerda sutilmente a “Mysterious Ways”, pero no es música de fiesta.

Las letras se preguntan si la democracia está enfrentando una “extinción”: A big mouth says the people they don’t want to be free (Un bocón dice que la gente no quiere ser libre). El coro continúa con insistencia: When the lights go out, don’t you ever doubt/ The light that we can really be (Cuando las luces se apagan, no dudes nunca/ acerca de la luz que de verdad podemos ser). No suena a amor… suena a resistencia.

Fuente: NYTimes.com