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El martirio de San Bono (En el nombre del poder)

Una nueva biografía denuncia la campaña antipobreza del cantante de U2 y sus arreglos personales impositivos. Pero sus compinches estelares, tales como Bill Clinton, lo defienden.

Para algunos, Bono es la última celebridad filantrópica, el rockero vestido de cuero que engatusa a los presidentes para encomendar miles de millones para ayudar a los más pobres del mundo. Pero, de acuerdo a una nueva y mordaz biografía, el cantante de U2 es un "embajador de la explotación imperial" y un hipócrita que no ha podido salir limpio de sus "turbios" asuntos impositivos.

Escrito por Harry Browne, un escritor con sede en Dublín, "The Frontman: Bono (In the Name of Power)" ["El líder: Bono (En el Nombre del Poder)"] es una brutal disección del rockero irlandés y de la motivación detrás de su campaña antipobreza.

El libro argumenta que Bono, de 53 años recién cumplidos, se ha convertido en un "símbolo inconsciente de la complaciente elite rica de occidente." Critica de la estrella "la defensa paternalista y a menudo abusiva de las soluciones neoliberales en África; sus intereses empresariales multinacionales; y su cercana relación con Paul Wolfowitz (expresidente del Banco Mundial)."

En lugar de demandar, Bono ha autorizado a sus cercanos colaboradores a impugnar las acusaciones formuladas en el libro. Y ayer uno de los más famosos admiradores del rockero liberal saltó en su defensa. El expresidente Bill Clinton dijo: "Pocas personas han hecho más para movilizar la respuesta mundial para luchar contra la pobreza y las enfermedades que Bono. Él es uno de los defensores más efectivos y comprometidos que yo haya conocido por la condonación de la deuda y la ayuda para las naciones más pobres, y para incrementar los fondos para luchar contra el SIDA y otras enfermedades cuyas víctimas son mayoritariamente jóvenes y pobres. Todos estamos en deuda con él."

Este es un largo camino desde la tesis del libro, en donde Browne regaña a Bono por sus arreglos impositivos. La banda movió sus negocios desde Irlanda a Holanda en 2006 luego que se limitaron las exenciones impositivas para artistas. "Bono va a la zaga de muchos de sus compañeros a la hora de partir con su propio dinero," dice Browne, el excolumnista del Irish Times.

El libro, publicado para coincidir con la cumbre del G8 del próximo mes en Irlanda del Norte, concluye que Bono "encubre las complejidades de las políticas de desarrollo africanas" de la cumbre de Gleneagles de 2005 y argumenta que la cancelación de la deuda acordada falló en efectuar un cambio real en el continente.

Jamie Drummond, que cofundó con Bono en 2004 la organización ONE para lograr la cancelación de la deuda y medicinas para el SIDA para África, dijo: "El activismo de Bono tiene resultados. La cumbre del G8 hizo un gran progreso en la cancelación de la deuda. Hay 20 millones más de chicos yendo a la escuela en el África Subsahariana. Decir que Bono no desafía al poder y a las elites es erróneo. Él nos está ayudando a luchar contra el Instituto Americano del Petróleo, que está haciendo una fuerte compaña lobista para evitar transparencia en las entradas de los pagos de los gobiernos africanos por petróleo, gas y derechos mineros."

Al respecto de la controversia impositiva, Drummond dice que Bono está haciendo una campaña activa por la transparencia impositiva. "Bono paga todos los impuestos que le corresponde en todo el mundo, incluyendo los de Irlanda. Está haciendo campaña por la transparencia en los centros financieros offshore. Bono está encabezando una campaña anticorrupción."

Drummond cree que la hostilidad que provoca el activismo de la estrella viene de la decisión del cantante de trabajar con George W. Bush. Drummond dijo: "Si realmente quieres efectuar un cambio… tienes que involucrarte con el poder."

Browne mantiene que "incluso más que su música, el trabajo internacional de Bono puede ser su más atroz crimen." Continúa: "La filantropía de celebridades viene en muchas formas, pero ninguna figura encapsula mejor los delirios, pretensiones y terquedades que Bono, un hecho que ni las gafas de sol ni los pantalones de cuero pueden ocultar."